En la última semana de septiembre, el fabuloso evento meteorológico (Northern Lights, en inglés) tuvo lugar en Canadá y se capturo desde Churchill, provincia de Manitoba.
El autor del video - y también de Twitter, Vincent Ledvina - indicó: “¡Video en tiempo real de una de las sub-auroras más coloridas que he visto! Esto fue la semana pasada en Churchill, Manitoba”.
Pero, al fin y al cabo, ¿cómo se forman las llamadas auroras boreales? Surgen gracias al efecto de las luces y brillos fluorescentes que se producen en los cielos del Polo Norte. El Sol proporciona a nuestro planeta calor, luz y pequeñas partículas, y es el campo magnético de la Tierra el que nos protege de la mayor parte de la energía y las partículas entrantes que se desprenden de la estrella más grande de nuestro sistema planetario.
Una corriente continua de viento solar y las tormentas solares generan un tipo de eyección de masa coronal; es decir, el Sol lanza una enorme burbuja de gas electrificado que puede viajar por el espacio a grandes velocidades, impactando contra nuestro planeta.
Cuando las tormentas solares llegan a la Tierra, parte de la energía y pequeñas partículas viajan a lo largo de las líneas del campo magnético, principalmente en la zona de los polos norte y sur, infiltrándose en las últimas capas de la atmósfera terrestre.
Allí, las partículas interactúan con diferentes gases atmosféricos, y debido a esto, aparecen en el cielo luces de diferentes colores. Son gases como el oxígeno los que permiten que los colores adquieran un tono verde y rojo fluorescente.
El nitrógeno, en cambio, crea un brillo intenso con colores azules y morados. Cuando estos gases se mezclan, los colores son abundantes y distintos: el rosa, el amarillo, el naranja y el blanco son otros colores que pueden aparecer.
En cuanto a la variante descrita y observada en el vídeo anterior, la subforma, también llamada subforma magnetosférica o subaurora, es una breve perturbación en la magnetosfera terrestre que hace que se libere energía de la "cola" de la magnetosfera y se inyecte en la ionosfera de altas latitudes.