La región sur de África sufre desde principios de 2024 una grave sequía, la peor en 100 años, debido al fenómeno de El Niño del año pasado. En Namibia, la sequía ya ha dejado a 1,4 millones de personas en inseguridad alimentaria. Esta cifra representa casi la mitad de la población del país.
Por ello, el gobierno de Namibia anunció el pasado martes(27 una medida desesperada para combatir el hambre de la población: el sacrificio masivo de animales salvajes para proporcionar carne a los necesitados.
En primer lugar, es importante destacar que esta matanza no será ilimitada: la medida tendrá condiciones específicas para su ejecución. Además, el objetivo del sacrificio no es sólo combatir el hambre, sino también prevenir conflictos entre humanos y animales por recursos escasos.
El comunicado difundido por el Ministerio de Medio Ambiente, Bosques y Turismo informa que cazadores profesionales realizarán la matanza en parques nacionales y zonas donde ya existe la caza sostenible.
En la práctica, la medida autoriza el sacrificio de 83 elefantes, 30 hipopótamos, 300 cebras, 60 búfalos, 50 impalas, 100 ñus azules y 100 eland, para un total de 723 animales.
Este plan distribuirá carne animal a la población en una acción que seguirá un modelo similar que ya ha aportado más de 56 mil kilos de carne mediante el sacrificio de 150 animales anteriormente.
Según el comunicado, “este ejercicio es necesario y se alinea con nuestra constitución, que establece que los recursos naturales de Namibia deben usarse en beneficio de los ciudadanos del país”.
Sin embargo, no todo el mundo está de acuerdo con esto. Organizaciones protectoras de animales (ONG) critican la matanza y afirman que existen otras alternativas para combatir la crisis alimentaria que enfrenta el país, como el aumento de la ayuda humanitaria y la inversión en agricultura sostenible.
Además, sostienen que la matanza de animales salvajes, especialmente elefantes, podría perjudicar al turismo, que es una importante fuente de ingresos para el país. En respuesta a estas críticas, el gobierno citó un caso reciente en el que unos elefantes mataron a un hombre el pasado domingo (25 de agosto).
Pero según el gobierno, proporcionar carne mejora la nutrición de las personas y contribuye a reducir la pobreza. Y también quiso reforzar en el comunicado: “Con la grave situación de sequía que vive el país, los conflictos entre animales y humanos podrían aumentar si el gobierno no interviene”.
Según las Naciones Unidas (ONU), al menos 27 millones de personas en el sur de África se vieron afectadas por la grave sequía provocada por el fenómeno de El Niño de 2023.
El evento climático provocó severos impactos en el sur de África, con temperaturas alrededor de 5 °C por encima de la media. En febrero de 2024, la región experimentó su clima más seco de las últimas décadas, recibiendo solo el 20 % de las lluvias esperadas para este mes.
Referencia de la noticia:
Ministry of Environment, Forestry and Tourism/Namibia. Press Release “Update on the culling of wild-animals as a result of drought and fatal report involving elephant”. 2024.