Ushuaia se ubica en el archipiélago de Tierra del Fuego, el extremo austral de Sudamérica, apodado popularmente por este motivo como el "Fin del Mundo": con mucho viento y dispuesta urbanísticamente en una escarpada colina, está rodeada también de los montes Martial y el Canal Beagle, siendo una vía de para los cruceros hacia la Antártida y a los recorridos cerca de la Isla Yécapasela.
Rodeada de montañas, bosques y el Canal Beagle, la ciudad más austral del mundo tiene excursiones realmente inolvidables para descubrir al máximo tanto su contexto natural como su contexto histórico y cultural: en este artículo te compartimos las principales propuestas para hacer, dónde ir y por qué durante una estadía.
Es la postal turística de Ushuaia por excelencia: esta excursión consiste en una navegación por el Canal Beagle para observar el famoso Faro Les Eclaireurs -uno de los faros más icónicos de Argentina- y otras atracciones naturales.
El mal llamado “Faro del Fin del Mundo” -que no es tal porque el más austral del continente es el Faro de San Juan de Salvamento, en la Isla de los Estados, en el extremo oriental de Tierra del Fuego-, la Isla de los pájaros, la Isla de Lobos marinos e Isla Bridge forman parte de una atracción turística imperdible para navegar a bordo de modernos catamaranes.
El recorrido, que se puede hacer tanto por la mañana como por la tarde para disfrutar de la caída del sol, está estimado en una duración de aproximadamente 3 horas y media.
El sendero a Laguna Esmeralda se encuentra ubicado en la Reserva Natural y Paisajística Valle Tierra Mayor, a la cual se accede desde la Ruta Nacional Nº 3, a una distancia de 18 kilómetros desde el centro de la ciudad de Ushuaia. Es una experiencia de aventura y trekking al aire libre ideal para quienes quieren disfrutar de la naturaleza sin aventurarse en largas caminatas.
El sendero cuenta con una longitud aproximada de 9 km entre ida y vuelta, por lo que el tiempo de duración está estimado en 5 horas. Gran parte del sendero transcurre por terrenos húmedos y resbaladizos por lo que para realizarlo se recomienda utilizar borcegos, ropa impermeable, bastones y abrigo durante todo el año. En especial, el destino advierte tomar mayores precauciones en las temporadas de otoño e invierno debido a que disminuyen las horas de luz natural, la zona registra temperaturas bajo cero y el terreno puede encontrarse con presencia de barro, hielo y/o nieve.
Una experiencia ferroviaria como pocas que tienen lugar en Argentina para conocer los rincones transitados por los antiguos presos del “Fin del Mundo”: además de descubrir un camino pintoresco gracias a los paisajes urbanos y naturales que se despliegan durante el recorrido, este trencito cuenta, al mismo tiempo, la historia de los presos que cumplieron su pena en Ushuaia.
Antiguamente, el tren partía desde el presidio y llegaba al Monte Susana donde los reclusos conseguían materiales para construir. Hoy en día, el recorrido comienza en la Estación del Fin del Mundo, a 8 kilómetros de la ciudad, y en una hora aproximadamente llega a la última estación ubicada cerca de la entrada del Parque Nacional Tierra del Fuego.
Ubicado a unos 12 km al oeste de la ciudad de Ushuaia, el Parque Nacional Tierra del Fuego es el parque nacional más austral de Argentina: una ubicación como tal imperdible para conocer y disfrutar cualquiera sea la época del año.
Conserva más de 68 mil hectáreas de la ecorregión Bosques Patagónicos, un paisaje subantártico testigo del encuentro del tramo final de la Cordillera de los Andes con el mar en el Canal de Beagle -que conecta los océanos Atlántico y Pacífico Sur-. De hecho, es uno de los pocos parques nacionales argentinos con costas marinas: el parque cuenta también con picos que se alternan con valles donde hay ríos y lagos originados en glaciares. Para ingresar, la tarifa general tiene un valor de $30.000, aunque para residentes nacionales el valor disminuye a $9.000.
Como en toda ciudad a visitar con fines turísticos, el city tour se presenta como una oportunidad ideal para que tanto grandes como chicos puedan disfrutar de una actividad en familia y tener una mirada más amplia sobre el destino, en este caso Ushuaia.
El paseo convencional se ofrece en diferentes agencias de viajes de la ciudad: se puede elegir hacer un city tour a pie junto con un guía especializado y recorriendo los puntos de interés de la ciudad (con la posibilidad de visitar alguno de los museos, por ejemplo) o por medio de un transporte.
Según explican desde la Secretaría de Turismo de la ciudad, la mayoría de los buses parten desde el puerto y visitan la plaza cívica, la antigua Casa de Gobierno, atraviesan la pasarela para tener una perspectiva panorámica de la ciudad, los barrios antiguos y el mirador de Las Hayas en el camino del Martial para apreciar el Canal Beagle desde arriba.
Otra manera de realizar este recorrido por la ciudad es en el City Train, un colectivo adaptado que imita la forma y el ambiente del Tren del Fin del Mundo; o a bordo del Double Decker -en funcionamiento durante los meses de noviembre a mayo-, un colectivo de dos pisos para recorrer los rincones de Ushuaia junto con un relato histórico y la posibilidad de sacar fotos desde un ángulo bastante privilegiado.
Si de conocer y explorar en detalle “el pueblo del Fin del Mundo” se trata, también hay algunas ubicaciones urbanas a las que vale la pena incluir en un itinerario: el Paseo de Artesanos Enriqueta Gastelumendi es uno de ellos. Se trata de un importante paseo de artesanos que se encuentra muy cerca de la plaza cívica y el puerto. Aquí, se luce un espacio de producción, exposición y venta de artesanías de la mano de una gran galería techada que alberga 48 puestos con taller.
La Reserva Natural Bahía Encerrada es otro de los points imperdibles. Conocida como el pulmón verde de la ciudad, su presencia ayuda a conservar especies silvestres y contribuye con fenómenos naturales como las migraciones de aves. Para llegar a ella hay que dirigirse al comienzo de la Avenida Costanera: esta reserva debe su nombre a que, literalmente, se encuentra “encerrada” por la pasarela Luis Pedro Fique.
Volviendo a la historia de los presos del Fin del Mundo, el Museo Marítimo y del Presidio también es un lugar impresionante para conocer. El mismo se encuentra levantado en el edificio del Ex Presidio de Ushuaia, donde se recluía a los criminales más peligrosos por su reincidencia.
Hoy este edificio alberga cuatro museos: el Museo Marítimo, el Museo del Presidio, el Museo Antártico y el Museo de Arte Marino, todos ellos dan cuenta de la historia de Tierra del Fuego.